La importancia del calostro para las cabras lecheras
La gestión adecuada del calostro es crucial para la salud y la supervivencia de las cabras lecheras. El calostro aporta nutrientes esenciales y protección inmunitaria, vitales para los recién nacidos, que nacen sin la inmunidad natural necesaria para defenderse de los patógenos ambientales. Dado que el 50% de las muertes de cabritos se producen en las primeras 24 horas debido a la falta de calostro, la alimentación con calostro de alta calidad poco después del nacimiento es fundamental para garantizar su supervivencia. En este artículo, exploramos la importancia del calostro, su composición nutricional y el papel esencial que desempeña en la prevención de enfermedades tempranas en los cabritos. Además, discutiremos los protocolos de manejo del calostro, incluyendo el uso de fuentes alternativas de calostro, las precauciones relativas a la contaminación del calostro para garantizar que sea seguro para el consumo.
Composición nutricional del calostro
- El calostro es rico en nutrientes que favorecen la salud de los recién nacidos:
- Energía (grasas): Ayuda a regular la temperatura corporal y a prevenir la hipotermia. Proteínas (inmunoglobulinas): Los anticuerpos IgG son esenciales para la protección inmunitaria contra los agentes patógenos.
- Vitaminas: Las vitaminas liposolubles como la A, D y E favorecen la función inmunitaria, el crecimiento y el desarrollo óseo.
- Minerales: Elementos esenciales como el calcio, el selenio y el magnesio favorecen el desarrollo del esqueleto y las funciones metabólicas.
Protocolo de gestión del calostro: Calendario, cantidad y calidad
La gestión eficaz del calostro incluye la consideración del momento, la cantidad, la calidad y la limpieza del calostro:
1. El momento: La absorción de anticuerpos es más eficaz en las primeras horas de vida, cuando el intestino del niño puede absorber proteínas grandes como las inmunoglobulinas. Algunas publicaciones sugieren que el periodo de "intestino abierto" dura hasta 24 horas, mientras que otros estudios indican que puede prolongarse hasta 36 horas. Sin embargo, en general se acepta que el calostro debe administrarse lo antes posible, idealmente en las dos horas siguientes al nacimiento, para maximizar la inmunidad.
2. Cantidad: Los cabritos recién nacidos deben recibir 15-20% de su peso corporal en calostro en las primeras 24 horas. Esto puede dividirse en varias tomas, empezando con 5-7% de peso corporal en la primera toma, seguida de tomas más pequeñas hasta alcanzar el objetivo. Por ejemplo, un cabrito de 3 kg debe recibir unos 150-210 ml en la primera toma.
3. Calidad: El calostro de alta calidad contiene más de 50 gramos de IgG por litro, medidos con una lectura del refractómetro Brix superior a 25%. El calostro de calidad intermedia se sitúa entre 22-25% Brix (alrededor de 20-50 gramos IgG/L), mientras que el calostro de baja calidad tiene menos de 20 gramos IgG/L (por debajo de 19% Brix). Asegurarse de que el calostro tiene suficientes IgG es vital para proporcionar una protección inmunitaria adecuada al cabrito.

Métodos de alimentación artificial: Biberón o sonda
El calostro debe administrarse a la temperatura corporal, en torno a 38,5-39,5 °C, que es la temperatura corporal normal de un recién nacido. La alimentación con biberón es el método preferido porque permite al niño mamar de forma natural, pero puede utilizarse la alimentación por sonda si el niño está demasiado débil para mamar. La alimentación por sonda garantiza que el cabrito reciba el volumen necesario, pero requiere habilidad y precaución para evitar lesionarlo o causarle una neumonía por aspiración. La capacidad estomacal máxima de un cabrito recién nacido es de aproximadamente 7-10% de su peso corporal, por lo que hay que tener cuidado de no sobrealimentarlo.
Necesidades de IgG para cabras
La cantidad de inmunoglobulina G (IgG) que debe recibir un cabrito recién nacido es fundamental para garantizar una transferencia adecuada de la inmunidad pasiva. La ingesta mínima recomendada de IgG se sitúa entre 8,7 y 13 gramos por kilogramo de peso corporal. Por ejemplo, un cabrito de 3 kg necesitaría entre 26,1 y 39 gramos de IgG en las primeras 24 horas para garantizar una protección inmunitaria adecuada. Esta directriz está respaldada por investigaciones que demuestran que los niños que reciben menos de esta cantidad de IgG son más propensos a fracasar en la transferencia de inmunidad pasiva y a tener una mayor morbilidad y mortalidad.
Fuentes alternativas de calostro para cabras
En situaciones en las que el calostro materno esté contaminado, no esté disponible, sea insuficiente o no tenga suficiente calidad, pueden utilizarse fuentes alternativas de calostro:
1. Calostro de otra cabra: Si está disponible, se puede utilizar el calostro de otra cabra sana. El calostro sobrante de las hembras debe recogerse y congelarse en pequeñas porciones de una sola toma (200-250 ml). El calostro congelado debe descongelarse en un baño de agua caliente por debajo de 50°C/122°F para preservar los nutrientes y el contenido de inmunoglobulinas.
2. Sustituto del calostro: Existen sustitutos comerciales del calostro que son un buen sustituto del calostro materno. Estos productos suelen ser de origen bovino y están formulados para proporcionar al menos 50 g de IgG por litro, lo que equivale a un calostro caprino de alta calidad. Un buen sustituto debería elevar la concentración de IgG en el suero del cabrito por encima de los 15 gramos por litro, proporcionando una protección suficiente.
Precauciones de uso del calostro
Hay que tener cuidado al seleccionar las fuentes de calostro, ya que el calostro contaminado puede suponer graves riesgos para la salud de los recién nacidos. Evite alimentar con calostro de hembras afectadas por:
- Encefalitis artrítica caprina (EAC)
- Mycoplasma
- Linfadenitis caseosa (CL)
Estos patógenos pueden transmitirse al cabrito a través del calostro, causando problemas de salud a largo plazo o incluso la muerte. En los rebaños donde estas enfermedades son una preocupación, la pasteurización del calostro o el uso de sustitutos comerciales de calostro puede ser la opción más segura.
Conclusión y resumen
En conclusión, la gestión eficaz del calostro es esencial para la salud y la supervivencia de las cabras lecheras. Los puntos clave son:
- Alimentar con calostro de alta calidad en las 2 primeras horas de vida para garantizar la absorción de los anticuerpos esenciales.
- Proporcionar un total de 15-20% del peso corporal del cabrito en calostro en las primeras 24 horas, con al menos 8,7-13 gramos de IgG por kilogramo de peso corporal.
- Utilizar fuentes alternativas de calostro cuando sea necesario, garantizando al mismo tiempo una manipulación adecuada y evitando la transmisión de enfermedades a través de calostro contaminado.
Siguiendo estas directrices, los ganaderos caprinos pueden reducir considerablemente las tasas de mortalidad y mejorar la salud y vitalidad generales de sus rebaños.
Referencias
Chigerwe, M., Tyler, J. W., et al. (2008). Colostral Immunoglobulin G Concentrations in Dairy Goat Colostrum (Concentraciones de inmunoglobulina G en el calostro de cabras lecheras). Journal of Dairy Science, 91(5), 1853-1861.
Weaver, D. M., Tyler, J. W., et al. (2000). Passive Transfer of Colostral Immunoglobulins in Newborn Dairy Calves (Transferencia pasiva de inmunoglobulinas calostrales en terneros lecheros recién nacidos). Journal of Dairy Science, 83(5), 924-930.
Guía de uso del refractómetro Brix. (2021). Manual de manejo de cabras lecheras.
USDA. (2020). Pasteurización de calostro para pequeños rumiantes. Instituto Nacional de Alimentación y Agricultura.